Y ahora, ¿quién podrá defendernos?

La barrabrava de la UTPBA causó más daños de lo que uno se animaba a pensar. Este gremio o por los menos algunos miembros del mismo, que en lugar de apoyar a los periodistas, los ataca, está minando la lucha salarial -y las cabezas- de los empleados de la editorial Perfil, propiedad del emperador Jorge Fontevecchia.

Lo mas grave de la situación es ahora el parte médico de Tomás Eliaschev, el periodista que ayer fue agregido por pedir a los sindicalistas que apoyaran la medida de fuerza de los trabajadores. Según me confesaron, Tomás sufre una fractura de cráneo con pérdida de movilidad del ojo izquierdo y un fuerte hematoma que inflamó el cerebro. Si no se desinflama deberán operar.

Los periodistas decidieron hoy prolongar un paro general hasta el martes que viene cuando se realizará otra asamblea. La novedad es que en la votación hubo muchas abstenciones y sufragios negativos por el lógico temor de los trabajadores al no tener ya el esperado respaldo del gremio.

Y ahora, ¿quién podrá defenderlos?